Tampere, ciudad de la región de los lagos, cuenta con suficientes atractivos para pasar un par de días. Ciudad de estudiantes y rodeada de parques naturales, es una buena base para conocer la región.
Dos horas de viaje desde Helsinki y con conexión directa de avión desde Málaga, Londres, Milán, Riga o Frankfurt, si llegas a Tampere, aquí tienes una mini-guía para exprimirla en un día.
Desayuno en el mercado: Una vez vencida la pereza, lo mejor es empezar con una visita al mercado municipal, Kauppahalli, para tomar un café y un bollo (pulla). El mercado está en el mismo centro de la ciudad y es un lugar perfecto para comprar pescado, carne de reno o degustar la famosa mustamakkara (aunque no la recomendamos a primera hora del día).
Tampere, una ciudad entre lagos
Por el centro se empieza, de Keskustori a Finlayson: Keskustori, la plaza del centro, es el lugar de inicio a toda visita. Cerca de la estación de tren, alberga la catedral, la fábrica de papel cuyas nubes son seña de identidad de Tampere y el ayuntamiento. A pocos minutos andando, llegarás a Finlayson, el antiguo centro industrial de la ciudad.
Los rápidos, una de las atracciones del centro
Los ladrillos rojos de Finlayson: Conocida como la Manchester de Finlandia, tal vez una exageración, Tampere cuenta con un pasado industrial ligado a Finlayson y sus fábricas de téxtil. Un paseo por Finlayson y la visita alternativa a sus museos son una buena forma de palpar el pasado entre edificios de ladrillos rojos y antiguas chimeneas.
La Manchester de Finlandia
De parque en parque, Näsinpuisto y Hämenpuisto: Si hay algo que abunda en Tampere son los teatros y los parques. Dejaremos el teatro para más tarde y, de momento, una visita al parque de Näsinpuisto es la mejor forma de obtener las primeras vistas del lago Näsijärvi, antes de subir a uno de los emblemas de la ciudad, muy cerca del parque, Näsinneula.
El parque de atracciones de Särkänniemi
Vistas panorámicas desde Näsinneula: Esta torre con aspecto de nave espacial es uno de los símbolos de la ciudad. Previo pago de entrada, podrás subir y disfrutar de una vista en 360 grados de la ciudad y los dos lagos que la rodean. En lo alto, además de una cafetería, hay un restaurante. Como todavía es pronto, lo mejor será seguir la visita. Si viajas con niños, será difícil de eludir el parque de atracciones Sarkaniemi.
Vistas desde la torre Näsinneula
De lago a lago: Una ancha calle arbolada, Hämenpuisto, une prácticamente los dos lagos que rodean a Tampere. A lo largo de esta agradable esplanada, podrás ver la curiosa biblioteca de la ciudad, en forma de caracol, uno de sus múltiples teatros y el Museo Lenin, tan pequeño como interesante o el Museo de los Mumins, también minúsculo pero muy recomendable para los más pequeños.
Colores otoñales en Hämenpuisto
¿Un poco de oso para comer?: Si aprieta el hambre, puedes optar por un menú en cualquiera de los restaurantes del centro. Volver a Kauppahalli es una opción, pero también hay opciones como Harald, si quieres probar la carne de oso, o varios restaurantes de cocina tailandesa o china.
En Pispala también se come bien
Subiendo la colina hasta Pispala: El barrio más pintoresco de Tampere es, sin duda, Pispala. Puedes caminar desde el centro o bien tomar un autobús. Una vez en lo más alto, las vistas son increíbles. Casas de madera y recuerdos de otros tiempos se mezclan en el barrio más bohemio de la ciudad. Imprescindible.
Una sauna en centenaria en Pispala
Un donuts y para abajo: En Pynniki, al regresar de Pispala, hay una pequeña torre con cafetería incluida, la Pynniki Näkötorni. Las vistas son buenas pero, lo mejor, son los famosos munkkis, una especie de donuts que sirven en su cafetería. Satisfechos los golosos, es hora de andar.
Los donuts más famosos se comen en Pynniki
¿Una tarde en la sauna? Tampere cuenta con algunas saunas públicas muy famosas en el resto de Finlandia. Si aún no has tenido la suerte de probar la sauna en tu visita a Tampere, ir a la centenaria Rajaportti en Pispala o a Kauppi o Rauhaniemi en el lago Näsijarvi son excelentes ideas. Lago, naturaleza y calor son la mejor forma de relajarse después de las caminatas del día.
Lago helado y sauna
Cena y fonda: Después de la sauna, lo más normal es tener hambre. Si te ocurre, puedes acercarte al barrio de Tammela, con varios restaurantes y pubs. Cerca de la estación también hay buenas opciones si quieres tomarte una cerveza o comer una hamburguesa en condiciones.
Cuando cae el sol, hora de comer
Teatro, conciertos o disco: Tampere, como buena ciudad universitaria, cuenta con varios clubes, bares y muchos teatros, por lo que se la conoce en el resto del país. Consulta los carteles colgados por el centro antes de elegir la mejor forma de culminar el día en Tampere.
La noche es salvaje en Tampere
Y si lo que quieres es ver Tampere a vista de pájaro, aquí una fantástica web donde volarás en helicóptero para descubrirla…
